La Chaqueta Verde cumple la mayoría de edad

José Angel Rodríguez. El Club de Golf Aranjuez celebra en esta temporada 2012 su vigésimo aniversario. Una de sus señas de identidad –como lo es el campo Soto del Real- es la concesión de la Chaqueta Verde al vencedor de la Orden de Mérito Individual. Sin embargo, la prenda deportiva más famosa de la ciudad no nació conjuntamente con la entidad, allá por julio del 92, sino que se instauró en enero del 95.

Por lo tanto, con la Chaqueta Verde que vistió Daniel Valenciano hace unas fechas el trofeo cumplió su mayoría de edad. Eso sí, dieciocho americanas para diecisiete golfistas, puesto que el expresidente Tirso Maroto (1998-2001) es el único jugador que posee dos de ellas colgadas en su ropero, las correspondientes a los años 1996 y 1999, esta última obtenida en pleno mandato.

La historia de tan codiciado galardón semejante al del Masters de Augusta nace en el Reglamento aprobado en diciembre de 1994 por la Junta Directiva que encabezaba José Vera. En él se establece que a partir del 9 de enero de 1995 “todos los torneos que se disputen en las instalaciones del Club serán valederos para optar a la Orden de Mérito del Club” según unos criterios que se detallaban a continuación.

En ellos se especificaba que los torneos, aunque abiertos al público en general, sólo eran puntuables para los socios con licencia federativa acorde a una tabla de puntos que iban desde los 300 para el ganador a un punto por participación en orden descendente (200, 100, 80, 60, 50, 40, 30 y 20). Estos puntos se irían acumulando en un máximo de quince torneos y en caso de que el jugador tomara parte en más se desecharían los peores resultados.

Por todo ello, el premio –la Chaqueta Verde- “será entregado en la cena anual del club que se celebrará en el mes de diciembre de 1994”, concluía el Reglamento.

Así pues, Antonio Suárez tuvo el honor de enfundarse la primera, la correspondiente a la O.M. 1994. La segunda y la tercera recayeron en Pedro Costa y Tirso Maroto, quienes dieron paso a las nuevas generaciones de jugadores que ya sobresalían en aquellos agrestes terrenos que acabarían por convertirse en el coqueto campo que hoy conocemos. Miguel Angel Molina (97) y José Alberto Muñoz (98) rompieron la hegemonía de los golfistas curtidos en la tierra del “Disgusta”, aunque por poco tiempo.

Miguel Angel Molina (97), Tirso Maroto (96)
y José Alberto Muñoz (98).

Miguel Angel Molina con el alcalde José María Cepeda (1997).

José Alberto Muñoz con el delegado de Deportes Víctor Martínez (98)

Con Maroto se volvieron a encadenar cinco años de pioneros: Juan Antonio Orriols, el entonces delegado de Turismo José Luis Menéndez, Isidoro Morte y Amalio Guzmán (1999-2003). Con Morte se dio el caso de que por motivos profesionales el concejal ganador de la O.M. previa, Menéndez, no pudiera ayudarle a vestirse la Chaqueta, por lo que fue Orriols quien se encargó de ello.

Tirso Maroto (99) y José Luis Menéndez (01).

Juan Antonio Orriols (00), Isidoro Morte (02) y el alcalde Cepeda.

Juan Antonio Orriols (00) e Isidoro Morte (02)

El siguiente cuatrienio fue tomado de nuevo por la savia muy joven del club: Miguel Angel Parra, Robert Leal, Carlos Yubero y Alejandro López hasta la irrupción de Pablo Bueno en 2008. Eduardo Cominero y José Angel Rubio retomaron el poder hasta la llegada de José Antonio Luna el pasado año, quien vistió de verde green a Daniel Valenciano, otra promesa con la que de momento se cierra la lista de ganadores.

Amalio Guzmán (03) y Miguel Angel Parra (04).

Robert Leal (05).

Carlos Yubero (06).

Alejandro López (07) entre la presidenta Charo
del Valle y el alcalde Jesús Dionisio.

Alejandro López (07) y Pablo Bueno (08).

Eduardo Cominero (09).

Se han otorgado en varios restaurantes y en la sede del club. Se han concedido en invierno y en verano. Las ha habido de tweed, de pana y hasta de terciopelo. Pero sin duda alguna el paño de la Chaqueta Verde está confeccionado con sueños y sus costuras cosidas con sacrificio.