Emilio Bautista.- Si el partido pasado criticábamos el mal juego de los chicos de Don P´Alpie en esta ocasión nos brindaron posiblemente los mejores minutos de lo que va de temporada.
Saltaron los "rojillos" bien posicionados despiertos hábiles y rápidos y tan solo la desgracia que acompaña a este equipo de "cara a gol" impidió que marcara tres o cuatro goles en los primeros minutos de partido porque generaron multitud de ocasiones para ello. Sin embargo en la primera ocasión que llegaban los locales hacían gol y se adelantaban en el marcador.
No tardaron los de Aranjuez en nivelar el partido porque repetían en su buen juego, trenzado y rápido pero nuevamente en una ocasión aislada se volvían a a adelantar los locales sin merecerlo.
Siguieron los de Lorenzo en la misma tónica y en un claro dos contra uno que hubiera significado el empate, corta el portero local llegando el balón a un jugador adelantado que anota el tercer gol de los de Villalba.
Los que presenciábamos el partido no podíamos dar crédito a lo que estábamos viendo y es que los de Don P´Alpie ponían el juego, las ocasiones y el control pero los locales hacían los goles. Afortunadamente y a poco de llegar al descanso los de Aranjuez recogían un balón en las inmediaciones del área y anotaban su segundo gol, seguramente en la jugada menos precisa de cuantas se habían visto en el primer tiempo.
Empezaba el segundo tiempo y la tónica se mantenía igual, ya no era tanta la presión ni el acoso visitante, pero se seguía controlando el partido hasta el punto de anotar en dos ocasiones y situar el marcador a favor en un 3 a 4 que empezaba a repartir justicia en función de los méritos de unos y otros. Pero nuevamente donde deberían de haber materializado los de Don P´Alpie y en su poca fortuna de cara a puerta, se producía el efecto contrario y eran los locales los que anotaban en dos ocasiones para volver a poner el marcador a su favor con un 5 a 4.
Seguía sin ser justo el resultado y todo se complicaba en exceso porque los locales apretaban con dureza y el colegiado empezaba a sentir la presión de la grada, mirando para otro lado en repetidas faltas que realizaban los locales y que hubiera permitido a los de Lorenzo ejecutar algún que otro doble penalti merecido, pero estos chicos cuando quieren no aflojan y siguieron acosando al equipo rival y poniendo contra las cuerdas a su portero que veía como encajaba dos nuevos tantos que permitía adelantarse a los visitantes y que esta vez si, supieron guardar como ventaja hasta el pitido final.
En resumen, excelente y vibrante partido el realizado en Collado Villalba en una tarde gris y desapacible donde los jugadores de Don P´Alpie supieron estar a la altura y no se relajaron un solo segundo. Cierto es que el resultado fue demasiado justo para los méritos que hicieron y tal vez deberían de haber sufrido bastante menos para traerse los puntos a casa porque ocasiones generaron para que así hubiese sido, pero esperemos que el aprender a sufrir como en esta ocasión ayude para futuros encuentros.