El fútbol no solo vive de juego. Se trata de un deporte
vivo, cambiante, con un drama imperante que lo convierte en altamente volátil.
Una buena forma de interpretar cuál es el estado de un club, puede asimilarse
leyendo la prensa deportiva especializada.
A lo largo de las semanas aparecen
un sinfín de publicaciones que detallan el rendimiento de los jugadores.
También se detallan las problemáticas internas, las previas de los partidos y
diversos análisis sobre el estado de juego de los equipos.
También existen otros métodos menos ortodoxos, como
analizar las diversas cuotas que ofrecen las casas de apuestas. En Oddschecker vemos una pequeña selección, y podemos apreciar cómo difieren bastante entre ellas en
relación a sus previsiones. Normalmente, Barça
y Madrid parten como favoritos, pero este año esta siendo especialmente
complicado anticiparse a su rendimiento, especialmente fuera de casa. Esto debe
hacer sonar la voz de alarma. Ambas entidades han mostrado un inicio errante que
vaticina un camino tortuoso en Europa. Una situación que se repite
constantemente, ambos equipos viven periodos de crisis puntuales a causa de su
exigencia. Si quieren retomar el rumbo, deben solucionar una serie de problemáticas
internas, y algunas de ellas se arrastran del pasado curso.
Primero comenzaremos analizando el caso del FC Barcelona. El equipo entrenado por
Ernesto Valverde arrastra los mismos problemas que ya mostró la pasada
temporada. El equipo no logra encontrar la fluidez necesaria para brillar sobre
el terreno de juego. Existen nombres de peso en el equipo, como los de Ousmane Dembélé, Sergio Busquets o Gerard
Piqué, que no están exprimiendo todas sus capacidades.
También se ha generado una situación de incertidumbre
con relación a una de las incorporaciones estrellas de esta temporada: Antoine
Griezmann. El delantero francés llegó al club catalán procedente del Atlético
de Madrid. En el conjunto colchonero era toda una referencia; deportiva y
mediática. El jugador decidió cambiar de aires en un traspaso polémico, con
muchas informaciones cruzadas, rumores y comentarios en todo tipo de soportes.
Todo hacía presagiar que el jugador se integraría rápidamente en la disciplina
azulgrana.
Conocía la Liga, buena parte de los campos que conforman el
calendario regular, y la mayor parte de los rivales. Pero jugar en el Barça no
es fácil, además en el Atlético de
Madrid protagonizaba un rol muy similar al de Messi. Y ese lugar en el
Barça ya está ocupado por el astro argentino. Su poca química con el resto de
jugadores, también genera una sensación de preocupación en la cúpula azulgrana.
Es bien sabido que el vestuario quería incorporar de nuevo Neymar, y el fichaje del francés deja entrever que no contaba con
apoyos internos.
El Barça
también está mostrando una falta de gol cuando juega partidos fuera de casa. Si
Messi no tiene el día, el conjunto catalán sufre. Es obvio que siempre existirá
una dependencia del argentino cuando se encuentre en el terreno de juego, pero
si no tiene el día, no hay alternativas.
Sin embargo, no todo son malas noticias en el conjunto
culé. El Barça ha acertado
plenamente con la incorporación de Frenkie
de Jong, un fichaje que generó un consenso casi inédito en el entorno culé.
Sus capacidades técnicas y tácticas ya se encontraban fuera de toda duda, pero
esta primera fase del campeonato ya ha desvanecido todas las posibles
incógnitas en relación a su juego. La irrupción de Ansu Fati -diamante en bruto de la cantera blaugrana- es otra nota positiva.
Estas dos piezas han aportado savia nueva a un equipo que mostraba síntomas de
estancamiento. El equipo se encuentra actualmente líder de la clasificación y
está bien encarado con relación a clasificarse para la fase final de la
Champions League. Deberá vencer al Dortmund en casa si quiere conseguirlo.
En el otro lado del tablero encontramos al Real Madrid. El equipo de Zidane ha
protagonizado un inicio de curso dramático. En la Champions League sufrió una
derrota dolorosa ante el París Saint Germain por 3 goles a 0 que hizo sonar la
señal de alarma. Las malas sensaciones se hicieron aún más palpables cuando el
equipo empató con el Brujas en casa en la segunda jornada de la competición. El
Madrid se encontraba contra las
cuerdas en Europa, pero como casi siempre sucede, se recompuso y ha conseguido
dos victorias ante el Galatasaray que han hecho enderezar su rumbo.
Pero a pesar de esta resurrección, el estado de ánimo
madridista no es el mejor. El equipo todavía arrastra el duelo de la pérdida
deportiva de Cristiano Ronaldo. Era
un jugador superclase, un hombre gol que conseguía sumar 40 o 50 goles por
temporada. El equipo no ha encontrado un recambio que pueda protagonizar este
rol, lo que ha provocado que el resto de compañeros tengan que ponerse las
pilas. Uno de los fichajes estrella, Eden
Hazard, está protagonizando actuaciones de luces y sombras. Una situación
similar a la que vivió Coutinho el
club azulgrana. Su aportación no está resultando tan determinante como se podía
presagiar, aunque ha firmado algunas actuaciones destacables estos últimos partidos.
En Ipurua se vio al mejor Hazard de la temporada, y su mal rendimiento puede
estar relacionado con el período de aclimatación normal dentro una nueva
entidad.
Dejando de lado el inicio tortuoso del equipo en la fase
inicial de la temporada, el equipo ha conseguido sumar cinco partidos
consecutivos dejando la portería a cero. Courtois,
portero blanco, se encuentra a dos minutos de superar el récord de
imbatibilidad de Keylor Navas. Sólo tiene que aguantar dos minutos con la
portería a cero ante la Real Sociedad
y lo conseguirá. El partido se disputará el próximo 24 de noviembre, y será un
dato a tener en cuenta. El portero belga ha sido muy discutido en las últimas
semanas, y este hecho seguro que mejorará su estado de ánimo y reforzará su
confianza.
La irrupción del joven talento Rodrygo también es una nota positiva. Recuerda el caso de Ansu Fati el Barça. Dos
futbolistas muy jóvenes que ya están protagonizando algunas portadas. El
jugador brasileño consiguió anotar un Hattrick ante el Galatasaray en casa. Se
trata del segundo jugador más joven de la historia en conseguirlo, sólo superado por Raúl González
Blanco. El delantero ha sido citado con la selección brasileña absoluta y es
una de las esperanzas blancas de esta temporada.
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Como ya hemos visto, los dos equipos han protagonizado un inicio de temporada de altibajos. Un factor determinante de cara a analizar su estado actual será el Clásico que enfrentará a los dos equipos el próximo 18 de diciembre en el Camp Nou. Una batacazo de cualquiera de los dos equipos podría hacer sonar de nuevo las campanas de alarma. Es más que un partido, y los jugadores son plenamente conscientes de ello.