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Tras lograr el ascenso a Preferente, el equipo de 1ª Regional dirigido por Lorenzo Núñez ha obtenido el campeonato después de vencer 4-6 al CDR La Paloma en las semifinales y 6-5 al CD Valle, con remontada, en la final.
Don P´Alpie 6 - CD El Valle 5
Jorge, Aitor, Víctor (2), Gabi (1) y Gonzalo (Tasio (1), Dani (1), Kempo, Tizón, Revu y Melero).
En ésta, los equipos comenzaron con un juego muy intenso y donde los de Aranjuez, según pasaban los minutos de comenzado el partido, fueron perdiendo la iniciativa y así llegaba el gol del 0-1 que ponía con ventaja al rival.
A partir de ahí, tuvo que comenzar a remar contracorriente el equipo ribereño y en una jugada de estrategia llegaba el gol del 1-1.
Con el partido igualado, en una fase en la que los de Aranjuez desconectaron llegaba la remontada de El Valle y llegaban dos goles que ponía el partido en un peligroso 1-3 en contra de los intereses ribereños.
Fue, a partir de ahí, cuando de nuevo Don P´Alpie volvía a ponerse las pilas y en unos buenos cinco minutos, antes de que se llegase al final de la primera mitad, llegaban los goles que permitían a los de Lorenzo Núñez retirarse al descanso con el partido igualado: 3-3.
En la segunda mitad ya, la tensión del partido y la incertidumbre por el resultado eran la tónica de un encuentro de los considerados, como así era, una final.
En el comienzo de la misma, Don P´Alpie encerró en su campo a un contrario que se veía sorprendido viendo, sobre todo, como los ribereños les creaban numerosas ocasiones obligando a su guardameta con sus acertadas intervenciones, a convertirse en protagonista destacado del partido.
Aun así, en dos minutos llegaban el 4-3 y de seguido el 5-3 que comenzaban a allanar el camino a los ribereños a falta de diez minutos para el final del encuentro.
Pero quizás una cierta relajación prematura por parte ribereña, en dos errores, El Valle acertaba con la portería rival para, después del 5-4, lograr el gol del empate a cinco que ahora a falta de tres minutos para la finalización del partido, volvía a igualarse.
Tras minutos de infarto y con el marcador en ese inesperado 5-5 donde las espadas volvían a estar en lo más alto y con los dos equipos jugándoselo todo a una carta llegaba el momento de la verdad. Era jugárselo todo a cara o cruz.
Y ahí, en un contraataque de manual, apareció la calidad del equipo ribereño para conseguir el gol del 6-5 a falta de poco menos de sesenta segundos en los que Don P´Alpie se dejó sobre el terreno de juego las pocas fuerzas que les quedaban para defender esa escasa renta que, afortunadamente para ellos, fue suficiente para alzarse con la victoria y a partir de ahí hacerse con el título de campeones.
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